Barranco de Callejamala desde Otañes ( Cantabria )


Uno de los rincones más bellos y tranquilos del extenso municipio de Castro Urdiales es el barranco de Callejamala, antaño centro de una intensa actividad minera: el camino que lo recorre aprovecha el trazado de un viejo ferrocarril minero.
Salimos desde la plaza de Otañes, junto al miliario romano, entrando por una calleja hasta un poco antes de la iglesia del pueblo, donde nos desviamos a la derecha para subir hasta las casas más altas de la localidad.
De aqui a las ruinas de unos antiguos descargaderos de mineral junto al río. A partir de aquí la pista se hace más pendiente, continuando valle arriba por parajes siempre arbolados, entre los que destaca el robledal que ocupa la cabecera. La ruta termina al alcanzar la divisoria con Vizcaya.

Iniciamos el recorrido en la plaza de Otañes.











Donde encontramos una antiguedad románica.











A la izquierda de la plaza se abre un camino que sin perdida nos lleva a una bonita iglesia, donde junto a ella encontramos una fuente con agua fresca.









Y una señal que nos indica el camino a seguir para entrar en el barranco.









Volviendo la vista vemos la peña de Santullan.











Y de frente ya la entrada a la vía verde del Barranco de Callejamala.










El cual se trata de una antigua vía de tren minero.























Motivo por el que pasaremos por pequeños túneles.






















Y por antiguos edificios mineros.























La ruta continua en ligero ascenso, pegada a un rió y por antiguos lavaderos usados hoy como abrevaderos.





















Pasamos junto a bonitos bosques, en los que los caballos tratan de esconderse al escuchar nuestros pasos.





















La zona es muy utilizada para el uso de la bicicleta de montaña.






















A la derecha del camino encontramos un túnel, el cual podemos atravesar en tiempo seco, en época de lluvias casi siempre esta embarrado, debido a que el ganado lo usa como refugio, en este caso debemos de seguir por la pista.








La ruta es larga, por lo que no viene mal un ligero tentempié para poder afrontar el camino de vuelta con garantias.








Llegamos al alto de Las Muñecas, el final de ruta, se trata de un punto donde las provincias de Cantabria y Bizkaia se tocan, tan solo queda el camino de vuelta por el mismo sitio, para una vez de nuevo en Otañes, dar por finalizada una bonita ruta de senderismo.



























Plano





Grafica de altura

Enlace








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