El Besaide es un monte, al que se puede acceder desde Apatamonasterio, a través
de varias pistas que conducen hasta él.
Es un monte emblemático porque en él se juntan Bizkaia, Gipuzkoa y Araba, las tres provincias que componen la Comunidad Autónoma Vasca.
En la cima se halla el monumento al montañero desaparecido encargado en los años 50 por el Club Vasco Navarro de Montaña, y poco antes de llegar a la cima está otro monumento, del artista japonés Yoshin Ogata, construido en 1990.
Una vez en Apatamonasterio no tenemos nada mas que buscar la entrada a la Vía Verde de Arrazola. Se trata de un antiguo trazado de vía férrea hoy convertida en senda que con sus 4.5 Kilómetros une los núcleos urbanos de Apatamonasterio con Arrazola.
En un agradable paseo por un bello entorno y mientras caminamos al lado del arroyo Arrazola, vamos ganando metros viendo de frente el popular monte Anboto.
A la derecha, tendremos siempre la visión sobre la imponente cara Norte del monte Anboto, que desde aquí, salva un desnivel de 1000 metros y desde donde podremos ver el impresionante y mítico "Paso del Diablo", un paso aéreo que impresiona por los barrancos que se precipitan centenares de metros en sus flancos.
Terminada la vía verde llegaremos a un lugar con sillas y mesas conocido como "El Tope", desde aquí seguiremos de frente por el camino que a la izquierda se abre.
Primero en ligero ascenso y luego con fuertes repechos iremos ascendiendo a la cumbre por pistas en las que no es difícil perderse.
Para evitarlo no tenemos nada mas que seguir las marcas blancas y amarillas.
En el collado de Besaide encontraremos el monumento encargado al escultor japonés Yoshin Ogata y que quiere representar el ciclo del agua y la vida con la presencia de los herrialdes de Hegoalde en cada uno de sus picos, y de las provincias de Iparralde figuradas en las prominencias que sobresalen al pie.
A escasos cien metros se encuentra la cima del Besaide.
Donde hay un bonito monumento dedicado a los montañeros fallecidos.
Fue el 30 de octubre de 1955 cuando se erigió en Besaide el primero de los monumentos a los montañeros fallecidos. Fue promovido por José Luis de Sopelana y Angel Sopeña y realizado por el arquitecto Luis Pueyo. La torre campanario es un símbolo de oración y la plaza circular quiere representar la unión entre los hombres.
Desde aquí tenemos una bonita vista sobre los rocosos montes Anboto y Udalaitz.
Pasado un buen rato en la cima nos decidimos no sin pena dar inicio al camino de regreso, para ello solo tenemos que descender al collado y allí coger a la derecha la pista que nos dejara de nuevo en Apatamonasterio.
Caminando unos 200 metros por ella veremos a la derecha una bonita fuente con agua fresca.
El camino es sencillo y fácil de andar, lo haremos rodeados de pinares y de bonitas vistas hacia el Anboto.
A lo lejos ya vemos el fin de ruta. Descendemos hasta pisar de nuevo la vía verde y tras unos cientos de metros ya estamos en Apatamonasterio, donde daremos por finalizada esta fácil y bonita ruta de montaña.
Pincha en el montañero para descargar el track
Es un monte emblemático porque en él se juntan Bizkaia, Gipuzkoa y Araba, las tres provincias que componen la Comunidad Autónoma Vasca.
En la cima se halla el monumento al montañero desaparecido encargado en los años 50 por el Club Vasco Navarro de Montaña, y poco antes de llegar a la cima está otro monumento, del artista japonés Yoshin Ogata, construido en 1990.
Una vez en Apatamonasterio no tenemos nada mas que buscar la entrada a la Vía Verde de Arrazola. Se trata de un antiguo trazado de vía férrea hoy convertida en senda que con sus 4.5 Kilómetros une los núcleos urbanos de Apatamonasterio con Arrazola.
En un agradable paseo por un bello entorno y mientras caminamos al lado del arroyo Arrazola, vamos ganando metros viendo de frente el popular monte Anboto.
A la derecha, tendremos siempre la visión sobre la imponente cara Norte del monte Anboto, que desde aquí, salva un desnivel de 1000 metros y desde donde podremos ver el impresionante y mítico "Paso del Diablo", un paso aéreo que impresiona por los barrancos que se precipitan centenares de metros en sus flancos.
Terminada la vía verde llegaremos a un lugar con sillas y mesas conocido como "El Tope", desde aquí seguiremos de frente por el camino que a la izquierda se abre.
Primero en ligero ascenso y luego con fuertes repechos iremos ascendiendo a la cumbre por pistas en las que no es difícil perderse.
Para evitarlo no tenemos nada mas que seguir las marcas blancas y amarillas.
En el collado de Besaide encontraremos el monumento encargado al escultor japonés Yoshin Ogata y que quiere representar el ciclo del agua y la vida con la presencia de los herrialdes de Hegoalde en cada uno de sus picos, y de las provincias de Iparralde figuradas en las prominencias que sobresalen al pie.
A escasos cien metros se encuentra la cima del Besaide.
Donde hay un bonito monumento dedicado a los montañeros fallecidos.
Fue el 30 de octubre de 1955 cuando se erigió en Besaide el primero de los monumentos a los montañeros fallecidos. Fue promovido por José Luis de Sopelana y Angel Sopeña y realizado por el arquitecto Luis Pueyo. La torre campanario es un símbolo de oración y la plaza circular quiere representar la unión entre los hombres.
Desde aquí tenemos una bonita vista sobre los rocosos montes Anboto y Udalaitz.
Pasado un buen rato en la cima nos decidimos no sin pena dar inicio al camino de regreso, para ello solo tenemos que descender al collado y allí coger a la derecha la pista que nos dejara de nuevo en Apatamonasterio.
Caminando unos 200 metros por ella veremos a la derecha una bonita fuente con agua fresca.
El camino es sencillo y fácil de andar, lo haremos rodeados de pinares y de bonitas vistas hacia el Anboto.
A lo lejos ya vemos el fin de ruta. Descendemos hasta pisar de nuevo la vía verde y tras unos cientos de metros ya estamos en Apatamonasterio, donde daremos por finalizada esta fácil y bonita ruta de montaña.
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